Seguridad Móvil, durante y después de la crisis sanitaria global

Seguridad Móvil, durante y después de la crisis sanitaria global

Autor: Fernando Castillo, General Manager, Mexico, Bittium

La crisis sanitaria creada por el COVID-19 está remodelando el entorno personal y social de todo el mundo. Y sin embargo la velocidad con la que naciones e individuos están adaptándose a la nueva realidad o nueva normalidad depende de factores económicos, culturales, sociales, educativos, geográficos así como de políticas públicas.

Las comunicaciones móviles son la herramienta de la que más se ha echado mano en los tiempos de la pandemia. Miles de empresas están haciendo trabajo en casa y pudiera ser que buena parte de sus trabajadores se mantengan en este modo de trabajo por tiempo indefinido. La pregunta es ¿realmente están listas para una operación de largo plazo bajo esta modalidad?

En general, los países emergentes y en desarrollo han tenido una adopción más lenta de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC). En muchos casos los usuarios carecen de la educación básica de los riesgos que hay en el uso de dispositivos celulares, tabletas y computadoras, así como de la posibilidad de perder información personal, corporativa o gubernamental delicada. Esto en sí representa un riesgo latente para el teletrabajo.

Muchas empresas han establecido reglas claras para el uso de computadoras para el entorno laboral: antivirus, VPNs, restricción en el uso de dispositivos de USBs o de navegación en sitios riesgosos. Todo ello, debidamente instalado en una arquitectura bien planeada y con las capas de seguridad necesarias.

Sin embargo, tratándose de teléfonos celulares como herramienta de trabajo las reglas suelen ser más laxas, los riesgos más altos y las consecuencias más severas. Tanto en un contexto de traer-tu-propio-dispositivo como si la organización proporciona un Smartphone como herramienta de trabajo al empleado, es necesario que las áreas adecuadas se hagan preguntas clave básicas para planear la seguridad de sus tele-trabajadores:

· ¿Qué tipo de protección en hardware y software queremos en los Smartphones de nuestros colaboradores?

· ¿Qué características del teléfono son esenciales para los usuarios: cámaras, Bluetooth, conexiones WiFi, SMS, MMS, ubicación, etc.?

· ¿Qué aplicaciones son indispensables y cómo podemos administrar su uso?

· ¿Qué herramienta de voz y mensajería queremos utilizar al interior de la empresa o del gobierno?

· ¿Cómo podemos asegurar que el tráfico de datos entre los teléfonos y los servidores corporativos se mantenga protegido?

Desgraciadamente estas preguntas son también las áreas de oportunidad para los cibercriminales que buscan explotar los puntos débiles de las organizaciones, y por ello, la preparación para el teletrabajo prolongado que garantice la seguridad y la continuidad es indispensable de inmediato.

Bittium cuenta con una solución que responde de manera transversal todas estas preguntas con productos y servicios escalables para proteger las comunicaciones móviles de grupos de todo tamaño y perfil.  Los dispositivos Tough Mobile ofrecen la primera línea de defensa en contra de ataques y junto con Secure Suite y Secure Call proporcionan la flexibilidad necesaria para que las organizaciones definan las reglas de uso y los mecanismos de comunicación con un cifrado avanzado para un concepto de operación protegido en todo momento.

La solución integral de Bittium protege toda la información valiosa en el teléfono ya lo largo del proceso de transferencia de datos de las aplicaciones, proporcionando la experiencia más segura para personas usuarias con o sin conocimientos en ciberseguriad. Además, una vez que las organizaciones enrolan o aprovisionan los dispositivos en el sistema, los usuarios no necesitan desarrollar habilidades digitales adicionales para recibir los beneficios de las características de seguridad del Tough Mobile, las cuales no están presentes en los teléfonos comerciales.

Estos tiempos de cambios son también de grandes oportunidades para replantearse la manera en que empresas y gobiernos abordan una nueva realidad que tendrá desafíos en todo, incluida la ciberseguridad. Contar con esquemas adecuados en esta materia puede jugar un rol positivo en la protección de bienes corporativos o de gobierno.

Si bien la economía de los países emergentes y en desarrollo sufrirá los impactos de la pandemia, los países pueden prepararse para enfrentar ciber-ataques móviles antes de que se vuelvan más comunes en los tiempos por venir y mitigar su impacto, con políticas efectivas a nivel gubernamental y empresarial.